Se espera un día frenético de diplomacia el lunes, ya que el acuerdo para permitir que Ucrania envíe granos a través del Mar Negro expirará a la medianoche y el último granelero que transportará granos ucranianos bajo el acuerdo actual partió ayer de Odesa.
La Iniciativa de Granos del Mar Negro se acordó originalmente en julio del año pasado, con la intermediación de Turquía y las Naciones Unidas, lo que permitió a Ucrania mover casi 33 millones de toneladas de cereales desde tres de sus puertos en los meses siguientes. El acuerdo se renueva cada pocos meses, y Rusia lo deja regularmente hasta el último minuto antes de aceptar extenderlo. Esta vez, sin embargo, las posibilidades de renovación parecen sombrías con horas para el final.
Con los envíos a través del Mar Negro vacilando, Ucrania ha buscado moverse más por canal y río hacia Rumania, considerando una operación de dragado en sus vías navegables interiores para permitir el paso de barcos más grandes.
El viernes, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, dijo que confiaba en que el acuerdo se extendería nuevamente, luego de hablar con su homólogo en Moscú, Vladimir Putin. Ahora quedan menos de 24 horas para llegar a un acuerdo, algo que se hizo más difícil luego de otro ataque en un puente que cruza el Estrecho de Kerch a Crimea temprano esta mañana, un incidente que probablemente también restrinja el tráfico marítimo en el área en los próximos días.
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